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ASOCIACIÓN CULTURAL FUENTE DEL SOL

EL AGUA EN LOS ALCORES I

 

EL AGUA EN LOS ALCORES (I)

Vitrubio decía que "

el agua es imprescindible para la vida, para satisfacer necesidades placenteras y para el uso de cada día". Sin duda alguna, estamos ante un elemento de la naturaleza que podemos considerar fundamental para la vida, de ahí que desde la antigüedad (Egipto, Mesopotamia, Grecia…) el hombre haya empleado infraestructuras hidráulicas para su mejor explotación; en este sentido hemos de decir que los romanos fueron grandes especialistas en la ingeniería hidráulica al ser capaces de mejorar la captaron, transportaron, distribuyeron y evacuaron fueron los romanos.

Pero al hablar de agua hemos de decir que nos vale cualquier tipo , de ahí que a lo largo de la historia de la Humanidad el ser humano haya buscado el agua en su estado puro, un agua de calidad que según Vitrubio no se encontraba en la embalsada, porque al decir de autores clásicos (Vitrubio, Paladio y Plutarco), el mejor agua, la más salubre, es aquella que no procede de estanques o charcas, no siendo éstas aptas para el consumo humano al estar expuestas a todo tipo de elementos contaminantes, de ahí la necesidad de buscarla. Ante esta situación los sistemas hidráulicos que el hombre ha desarrollado, tanto para el abastecimiento, como para el regadío, no son más que la forma en la que una sociedad se asienta en un territorio para producir y generar vida.

 

 

2.-LOS ALCORES Y LA CUENCA DEL GUADAÍRA

En el margen izquierdo del bajo Guadalquivir, entre el Guadaíra y el Corbones encontramos la comarca de los Alcores. Se trata de una configuración geológica del terreno estructurada en tres unidades geomorfológicas

1º.-Terrazas que sufren un proceso paulatino de elevación que llega a la cota de 20 metros.

2º.-Los Alcores, resultado de la acumulación de distintos tipos de materiales que han sido capaces de resistir la erosión, por lo que estos elementos se elevan sobre el paisaje plano que lo rodea. Estamos ante una alineación del terreno de unos treinta kilómetros con unas delimitaciones muy claras: por el N.E, el Corbones, o río de los recodos (también conocido en el pasado como Guadajoz) ; por el S.O, el Guadaíra.

La anchura de la pequeña estribación oscilando entre los seis y siete kilómetros, aumentando su altura a medida que disminuye su anchura; de esta forma, tenemos un desnivel de doscientos cuarenta y ocho metros al N.E, en Carmona, y de cien metros en Alcalá de Guadaíra. Esta alineación está formada por diecisiete colinas atravesadas por

una serie de pasos naturales llamados puertos que conectan las terrazas del Guadalquivir con una extensa y fértil llanura o Vega desde la que el Alcor aparece como una falla casi vertical, destacando su tono amarillento característico de tierras calizas.

3º.-La Vega, constituida a base de suelos margosos y arcillosos. Se trata de una amplia llanura de suaves ondulaciones formada por sedimentos arcillosos y margosos muy salinizados, que forma, en ocasiones, lagunas o charcas saladas en invierno y costras blancas en verano. Se trata de una superficie plana, de unos setenta metros de altitud media, heredada de un glacis de erosión, que puede datarse en el cuaternario medio, donde la dificultad de desagüe y la impermeabilidad del suelo, explicarían de alguna forma el encharcamiento de los suelos negros o arcillosos.

3.-EL ACUIFERO DE LOS ALCORES

En las entrañas del Alcor encontramos una de sus grandes riquezas: el agua, elemento que conforma el denominado acuífero de Sevilla-Carmona-Écija, y que es consecuencia de la porosidad del terreno que permite la filtración de las aguas pluviales y su almacenamiento dando lugar a embalses subterráneos en los que los manantiales hacen de aliviaderos o rebosaderos.

Para que un material acuífero actúe como almacén de agua subterránea es necesario que en su base y bordes disponga de formaciones impermeables que no dejan que se escape el agua, tanto de forma horizontal como vertical. En el caso de darse estas condiciones se genera un embalse subterráneo en el que se produce un flujo renovable de agua, aflorando de forma natural en forma de manantiales, tal y como ocurre en nuestra comarca, donde como consecuencia del basculamiento del terreno desde el noreste hacia el suroeste, las calcarenitas, compuestas por una roca permeable en superficie y otras impermeables intermedias, permiten el afloramiento de arroyos y manantiales a lo largo de los puertos o zonas de paso entre el Alcor y la Vega.

Todas estas aguas vierten al río Guadaíra, de 127,5 kilómetros de longitud, cuyo nacimiento hemos de buscarlo en la sierra de Pozo Amargo. Estamos ante un río que presenta un trazado sinuoso que tiene que salvar un desnivel de cota de 360 metros y cuyo régimen hemos de calificarlo como espasmódico y torrencial, con máximos caudales en otoño e invierno, hecho que provoca un elevado riesgo de inundaciones en su curso bajo.

VINCULACIÓN DE LOS ALCORES A LA CUENCA DEL GUADAÍRA

MUNICIPIO

TÉRMINO EN Km2

Km2 DENTRO DE LA CUENCA

Alcalá de Guadaíra

 

283,05

 

216,04

 

Carmona

 

924,47

 

211,91

 

El Viso del Alcor

 

19,96

 

16,94

 

Mairena del Alcor

 

69,47

 

69,42

 

TOTAL

1296,95

514,31

 

1.-INTRODUCCIÓN

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