Aportaciones de Fuente del Sol para el desarrollo del Centro Cultural Convento de Corpus Christi

El pasado jueves 24 de marzo, se abrieron las puertas del Centro Cultural Claustro de la Merced. Como no podía ser menos, desde nuestro grupo queremos agradecer al actual equipo de gobierno la recuperación de un espacio histórico infravalorado, cuyas estancias parece ser que van a ser destinadas al desarrollo de diferentes actividades culturales; aplaudimos, sobre todo, la restauración que se ha hecho del azulejo (San Pedro Nolasco redimiendo esclavos) que corona el acceso principal a las instalaciones y el “rescate” parcial de algunos elementos arquitectónicos originales (arcos de medio punto hechos de ladrillo), que hasta hace poco permanecían ocultos a los ojos del visitante. Igualmente, queremos agradecer a los responsables de cultura de nuestro Ayuntamiento su tino al haber creado una pequeña colección de piezas arqueológicas provenientes de fondos privados, y su acierto a la hora de crear un nuevo espacio pictórico para nuestro pueblo.

 

No obstante, nos vemos obligados a ejercer nuestro derecho a la libertad de expresión, para criticar constructivamente una serie de aspectos que se nos antojan menos felices que los apuntados anteriormente. Vamos a enumerarlos.

 

1. El mismo nombre del centro nos parece equivocado, puesto que la casa visueña de los mercedarios nunca se llamó “de La Merced”, sino del Corpus Christi, por lo que creemos imprescindible corregir este particular.
2. Si exceptuamos la cruz de la puerta de acceso, no hallamos por ninguna parte nuevos elementos que apunten a la historia de la casa del Convento del Corpus Christi. Por lo tanto, sería conveniente que de alguna manera se evidenciara el rico pasado del ahora Centro Cultural, por ejemplo, a través de carteles explicativos, recreaciones digitales, maquetas, etc.
3. La pérdida del blanco inmaculado que cubría todos los muros y paramentos de la casa conventual, y su sustitución por gamas de ocres y rojos; el uso de materiales del todo ajenos a aquellos que engalanaron el edificio histórico (mármoles para el suelo, barandas de aluminio); el cierre de las arcadas del claustro; la desaparición de cualquier reminiscencia de la captación de agua existente en el centro del claustro… son todos elementos que dificultan, cuando no lo impiden, el conocimiento histórico y el disfrute estético del que fuera un edificio del siglo XVII.
4. No existe un proyecto museológico/museográfico, escrito negro sobre blanco, para el nuevo Centro. Ello conlleva que su función misma esté sin definir y que no exista un programa cultural determinado, a pesar de que se ha destacado que será un espacio destinado a la exposición de colecciones pictóricas y/o arqueológicas.
5. Resulta curioso que en el nuevo espacio cultural se haya habilitado otra sala de conferencias -en un pueblo con tres centros cívicos con buenos salones de usos múltiples y una enorme casa de la cultura- cuando no hay ni la menor huella de estancias dedicadas a la realización de talleres o de salas que puedan albergar el Archivo Histórico Municipal (todavía sito en las salas altas del pabellón polideportivo)
6. En última instancia, nos desagrada enormemente que proyecto tan ambicioso se haya hecho sin consultar a los visueños en general, y a todos aquellos historiadores, historiadores del arte, arquitectos, aparejadores, artistas… residentes en nuestro pueblo, con cuyo concurso, la realidad del espacio que nos ocupa sería bien diferente. Valga al dato de que a nosotros se nos ha llamado, pero cuando todo estaba hecho.

 

Pero como hemos señalado anteriormente, y como hemos demostrado a lo largo de este texto, nos mueve un afán puramente constructivo. Por ello, desde nuestra asociación quisiéramos hacer llegar al equipo de gobierno nuestro deseo de que se creara una comisión de patrimonio, compuesta por partidos políticos, asociaciones y particulares, duchos en cuestiones histórico-artísticas, con el fin de crear un foro participativo gracias al cual se pudiera moldear, entre todos, un proyecto aún en bruto, o decidir en un futuro la suerte de nuevas iniciativas culturales. Pues en cualquier empresa concebida para propiciar el bienestar del pueblo tiene que participar el pueblo mismo.

 

Dejamos el órdago sobre la mesa.

 

Asociación Cultural Fuente del Sol.